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HAY DÍAS
Hay días que son música, que vienen a ti, para bailar con tu corazón, y entonces es ahí, cuando las nubes, ellas se hacen pintoras, sólo para ti. Hay días que quisieras, matar el mundo de amor, y emborrachar el mar, para robarle un beso. Hay días que el camino, tiene voz propia, y se deja escuchar, bajo la sombra, de tu alma. Incluso hay días y díaS Tan necesarios, como la noche, como un cielo estrellado, como la sonrisa de un niño,. y el brillo en los ojos, de un anciano... Un perfume de vida, una pareja de enamorados, un trompetista por la calle, unos tacones en la esquina, de tu tierra... Y ahora párate un instante, sin preguntas, sin respuestas, sólo abre la ventana, de tu oído interior, y ve como fluye, y respira porque aún, hay díaS Elena CR
MIENTRAS TANTO
Hay un silencio escondido, grita adentro de tí, huele a verdades, esas que nunca escucho, y de éstas, dónde tú y yo, conversamos, sabemos lo que sabemos. Y cada día nuevo, hacemos visita, en el mismo punto de partida, más adentro aún, en nuestro jardín, sus colores bañan, la bandera del corazón, debería ser así humanamente, nuestras verdades, saben que no, y qué decimos?? No sé tú pero yo, esperaré ese único instante, que vendrá de lejos, y ay que vendrá!!! Hay un silencio escondido, observa!!! MientraS tantO Elena CR
SIN APENAS SABER DE TI
Era una tarde silenciosa, hacía buen tiempo, mis tacones tenían nervios, en el paso del puente verde, se iban encendiendo luces, entre el semáforo y aquellos coches. El corazón casi no encontraba saliva fresca, un aire de ternura iba acariciando, aquella esperanza de verte, cómo se puede amar tanto, sin apenas saber de ti. Quién me diría, que un ángel tan hermoso, alegre y saltarín, miraría mis ojos cansados y confundidos, me abriría sus alas de bondad, como un abrigo para el alma, y un café amistoso. El amor camina por el amor, en esos andares x siempre seguiré, pase lo que pase, de pie y firme, con mi espada angelical, y mis vestiduras de pasión. Entre versos y prosas, en cada letra la imaginación te hará el amor, y en otra vida te esperaré, con el vestido de los poetas, abriremos los brazos para nunca olvidarnos, entre cantares y danzas, brilla ésta historia, que hoy suelto a los cielos, sin apenas saber de ti. Elena CR