no quisiera para mi alma,
que desnuda la sorprendiera.
Pues ella,
en sus blancos deseos de un rocío de ocultas palabras,
y con el amor de su Ruiseñor en el corazón,
preparada para volar libre,
de todo temor y con una inmensa alegría,
hacia lo alto,
por encima de las nubes y hacia el jardín del otro mundo,
mi mundo real,
mi amada familia esperad os ruego,
esperad !!!
Elena CR